Los gobernadores peronistas, que en síntesis son pocos, apoyaron públicamente a Cristina Fernández de Kirchner tras la ratificación de la condena por parte de la Corte Suprema de Justicia. Varios de ellos calificaron el acto de “proscripción electoral”. Sin embargo, puertas adentro el diálogo se demora en llegar y prevalece la cautela.
Los ocho gobernadores peronistas se expresaron a través de la red social X en contra del veredicto del máximo tribunal, incluso aquellos que más cercanos están al gobierno nacional.
Transversalmente no hubo un acercamiento conjunto por parte de los mandatarios que aguardan con cautela política.
El gobernador de Santiago del Estero, Gerardo Zamora, tiene buen diálogo con Cristina Fernández pero al mismo tiempo una alianza legislativa en el Congreso Nacional con Milei. Y en el horizonte cercano unas elecciones donde se definirá la gobernación en su provincia, una de las dos en las que se elige Ejecutivo de forma cruzada con el resto del mapa federal.
En este sentido, el mandatario aseguró anoche que se solidariza con Cristina Kirchner. “Además, es imposible soslayar el grave impacto institucional que genera un acto de proscripción electoral, nada menos que contra la líder del principal partido de la oposición en nuestro país”, aseguró Zamora.
Lo propio ocurrió con el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, quien por redes sociales aseguró que la situación que atraviesa la dos veces presidenta “trasciende lo jurídico y tiene un fuerte impacto institucional”. “Excluye a una de las dirigentes con mayor representatividad del país de la contienda electoral y distorsiona la democracia”, aseguró.
Sin embargo, el gobernador no se contactó con la exvicepresidenta por privado, y tampoco existen intenciones de hacerlo por el momento. Catamarca es una de las provincias beneficiadas por Nación tras su alineamiento en la Cámara de Diputados.
El tucumano Osvaldo Jaldo, que es un acérrimo aliado libertario, tuvo que expresar su solidaridad con la presidenta del PJ Nacional al ser el mismo el presidente del PJ en su provincia. “En mi carácter de presidente del PJ de Tucumán quiero expresar mi solidaridad con la expresidenta, presidenta del PJ Nacional, en este momento difícil que le toca atravesar, en lo personal y en lo político”, aseguró Jaldo.
Asimismo, agregó que estaban convencidos que estos tiempos “exigen unidad y autocrítica dentro del Partido Justicialista”. “Es en estos momentos cuando el peronismo debe dejar de lado toda diferencia y actuar con responsabilidad, coherencia y compromiso con el pueblo”, indicó.
En un mensaje quizás un poco ambiguo, se refirió a los desafíos que enfrenta Argentina y para eso el peronismo debe estar “unido para trabajar en soluciones reales a los problemas que viven millones”. Paralelamente, fuentes allegadas al mandatario tucumano aseguraron que no hubo diálogo con la expresidenta y que no veían perspectivas de que lo hubiera más allá del apoyo a través de las redes sociales.
El gobernador Sergio Ziliotto, es el presidente del PJ en La Pampa, pero aún así no se ha pronunciado si se han contactado con Cristina o no. Fuentes allegadas afirmaron que no creen que brinde declaraciones hoy al respecto porque tiene “una agenda apretada”.
Aún así, el pampeano compartió un comunicado en el cual exhortó a celebrar “procesos limpios y transparentes”, ya que consideró que el proceso celebrado contra la dos veces presidenta no lo fue. “El fallo judicial contra Cristina Fernández de Kirchner, tan propiciado por el poder real de la Argentina como anticipado por sus apéndices mediáticos, transforma la decisión tomada por la Corte Suprema de Justicia en una mera formalidad procesal”, aseguró Ziliotto.
Además, destacó varios errores en el proceso y señaló una persecución específica a figuras del peronismo y una doble vara para tratar a líderes de otros espacios políticos. “Debe quedar en claro que nadie puede estar por encima de la ley, pero tampoco aceptar que sea la excusa para perseguir a los que piensan distinto. Las diferencias políticas deben resolverse a partir de la decisión popular en las urnas, no con la proscripción de los tribunales”, concluyó.
Los gobernadores más alineados
Quintela, a su turno, indicó que extendía su solidaridad, acompañamiento y compromiso con la actual presidenta del PJ. “Y con todo el peronismo a lo largo y a lo ancho del país. La justicia está condenando a quien dignificó al pueblo argentino. Frente a este atropello, reafirmamos la voluntad de construir un país con oportunidades, desarrollo y justicia verdadera”, aseguró el mandatario riojano.
El gobernador mantuvo una enemistad con Cristina luego que esta se quedara con la presidencia del PJ Nacional y lo llevara a bajar su candidatura. Dichas disputas, parecen haber quedado atrás, si bien el mandatario todavía no confirmó a este medio si había existido un diálogo más cercano con la exvicepresidenta.
“Necesitamos construir un modelo de país donde la gente se sienta representada, protegida y vea oportunidades reales para crecer. Un Estado que marque camino con desarrollo y posibilidades para todos”, señaló para diferenciarse del modelo libertario.
“Es positivo organizarnos para un proyecto que empatice con la sociedad, donde la gente se sienta identificada y vea que es posible avanzar. Hay que afrontar la deuda con responsabilidad, sin que el ajuste recargue el costo sobre el hambre y los puestos de trabajo”, indicó el riojano, quizás poniéndose un poco en el centro de la escena política con el desplazamiento judicial de Cristina Kirchner.
Por su parte, el también peronista Gildo Insfrán lanzó un comunicado extenso desde el PJ formoseño que preside donde aseguró que a pocas horas de recordar los 69 años de los fusilamientos de José León Suarez la Corte Suprema dio un fallo que ya había sido anunciado por los medios de comunicación.
“Y festejado con anticipación por los sectores antipopulares, nos vuelve a poner, como peronistas, ante la exclusión política”, remarcaron desde el PJ de esa provincia. Para Insfrán el fallo, lejos de ser un acto imparcial en un proceso judicial es “un acto político en un proceso llevado adelante por quienes fueron integrantes de la mesa judicial de la derecha argentina”.
“Este es un hecho de máxima gravedad institucional, porque pone en jaque la soberanía popular sobre la cual se asienta la República y la convivencia democrática”, remarcaron desde el PJ formoseño. Finalmente, aseguraron que no admite “el silencio de ningún espacio político”.
“Esta manipulación política-judicial no se funda en el derecho sino que es reflejo del odio histórico de los poderosos de la Argentina frente a cualquier expresión política en favor del pueblo. Fracasarán en su accionar antidemocrático y antipopular. El peronismo saldrá fortalecido y unido, venciendo sobre la oscuridad que nuevamente se ciñe sobre la Patria.”, concluyeron.
El gobernador Axel Kicillof, por su parte, mostró su apoyo a la exvicepresidenta con quién mantenía una disputa hasta hace dos semanas atrás por el control en la provincia de Buenos Aires. “Es un anunciado tras años de perversa persecución política, mediática y judicial”, aseguró el mandatario quien se encargó de dar diversas notas y reportajes durante toda la jornada.
“Se trata de un nuevo capítulo en la larga historia de ataques al peronismo y a quienes, como ella, se atrevieron a transformar la Argentina en favor de las mayorías. El lawfare y la estigmatización del campo popular se convirtieron en políticas de Estado”, indicó Kicillof.
Asimismo, aseguró que gracias a la presidencia de Javier Milei el clima de odio se ha intensificado contra quienes defiende la justicia social. “Tanto Macri como Milei desprecian la democracia con la misma intensidad con la que desprecian la dignidad del pueblo. Y por eso, hoy celebran”, concluyó.
Fuente: Aries Online